Resulta que en redes sociales Sandra de la Vega, esposa del futbolista Andrés Guardado está siendo criticada por viajar al mundial acompañada de una trabajadora doméstica.
La tachan de clasista, pero ¿realmente es clasismo de ella o de quienes la critican? Pues a quien llaman “la Mari” se le ve en las fotografías, tal cual fuera un integrante más de la familia, abrazando a la pequeña, al igual que Sandra abraza a su primer hijo.
No la dejaron afuera del estadio, también lleva el uniforme de la selección, y lo más probable es que se haya hospedado en el mismo hotel que la familia del futbolista.
Clasistas son aquellos que piensan que una trabajadora doméstica no puede ser compañera en un viaje.
Vía redes.